
El director manchego asume que él fue el primer sorprendido por la decisión. "Nunca pensé que fuera a hacer una película sobre 
Por supuesto, su versión será muy personal. "Quiero hacer algo especial. No va a haber tiros, no va a haber contienda. Se va a hablar de otras cosas, de seres que ahora viven y que en ese momento eran muy jóvenes. No sé cuando lo haré, pero lo tengo allí y estoy ya estoy escribiendo".
Para ello, se inspirará en la vida y obras del poeta Marcos Ana, que, nacido en Alconada (Salamanca) en 1920, "estuvo veinticinco años en una cárcel franquista. Salió con 42 y había entrado con 16, así que le tocó la guerra de adolescente".
 
  De momento, su presente se llama "Los abrazos rotos", que se proyecta hoy en Cannes, y su futuro inmediato le coloca a las puertas de esa Palma de Oro que rozó con "Todo sobre mi madre" en 1999 -premio al mejor director- y "Volver" -premio a la mejor interpretación femenina y al guión- en 2006.
"Desde hace ya bastantes años, aunque suene raro, el francés es nuestro primer mercado. Todas mis películas hacen más dinero en Francia que en España, a pesar de ser subtituladas", lo cual no significa que el éxito esté garantizado.
"Las dificultades para las películas son siempre las mismas. Tienen que gustar al público y eso siempre es un milagro que no se sabe cuándo y cómo se establece", explica.
 

